Flamenco de raiz: 2010

Cronica de la Peña Los Cernicalos SOLERA PURA.

“En Arabia Saudita se da una patá en el suelo y sale petróleo, y aquí en Jerez salen doscientos artista flamencos. Porque así lo quiso un Dibé”. Este fue el comentario emocionado que me hizo nuestro entrañable amigo y gran buleaero jerezano Sebastián Acevedo “El Berza” el pasado sábado en la sede de la flamenca Peña Los Cernícalos. En el escenario, alrededor de una mesa con sus correspondientes copas de Tío Pepe, “Chico Pacote”, “Juan Talega”, Ramón “El Coco” y el soniquete inigualable de la flamenquísima guitarra de Pedro Carrasco “Niño Jero”. Auténtica reunión de cabales, reunidos allí como resultado de la inquietud y el acierto, una vez más, de los buenos aficionados que dan vida a esta veterana e incansable peña, con su incombustible presidente Antonín al frente. Bajo el título, “PURA SOLERA DEL CANTE DE JEREZ”, se nos ofreció, a un auditorio totalmente abarrotado y entusiasmado, una muestra de eso que hoy en día escasea tanto en los espectáculos flamencos: autenticidad y espontaneidad con el aroma inconfundible que envuelve al cante antiguo y lo aleja de modismos innecesarios. Flamenco en estado puro en las voces de tres aficionados de postín. Comenzó “El Coco” con unas sentidas siguiriyas, quejándose como un verdadero maestro; “Juan Talega” comiéndose la pena por soleá, “Chico pacote” diciendo unos fandangos con ese rasgo plazuelero sello de la casa, y antes de que el numeroso público dejara de aplaudir y jalear sus actuaciones hizo acto de presencia la genuina bulería de Jerez, uno tras otro cantaron y bailaron colmando el escenario del compás, del duende y de la gracia inimitable que se derrocha en la tierra que es madre de este difícil cante. Una breve pausa sirvió para hacerle entrega a Sebastián Acevedo Flores “El Berza”, del DIPLOMA DE HONOR al apartado de Música concedido por el Centro Cultural Taller el Búcaro, de Madrid, correspondiente a la obra discográfica EL BERZA POR BULERÍAS, así como de la insignia de oro de la Peña Flamenca Los Cernícalos en reconocimiento a su indiscutible aportación a la cultura flamenca de Jerez. Inmediatamente pudimos disfrutar de una segunda parte construida con los mismos mimbres que la primera, que inundó de flamenquería este rincón del barrio de San Miguel, morada del Cristo de Santelmo a donde sin duda llegaron los ecos flamencos de estos tres aficionados cabales que guardan en sus corazones el raro tesoro de lo auténtico. P.C.